¿Cómo afrontar el desempleo?

Lun, 02/22/2016 - 14:20
Al ser despedido, en un primer momento la noticia es acogida con escepticismo y miedo, pero hay solución solo es cuestión de tiempo y de ser positivo.

Estudios clínicos demuestran la relación que existe entre la situación de desempleo y los trastornos psíquicos menores, siendo la consecuencia más habitual la aparición de cuadros de ansiedad y depresión.

Y es que el desempleo es una de las mayores preocupaciones que que existe en la actualidad.

El trabajo ha existido siempre y a través de él la persona no sólo realiza actividades productivas sino que también se desarrolla a nivel psicosocial. Se trata de un fenómeno de construcción social, es fruto de interacciones e intercambios entre humanos. Asimismo, el trabajo y todo lo asociado a él tiene un significado para las personas que lo realizan: el valor que le otorgan, los resultados que se obtienen o el estatus que merece en la sociedad.

Detrás del desempleo se esconde la desmoralización y el sufrimiento de miles de personas que quieren pero no pueden trabajar, la pobreza, la desesperación. El desempleo no significa solamente un individuo sin recursos económicos o sin trabajo remunerado, significa también una persona en cierta manera mutilada, afectando a la autoestima y creando sentimientos de inseguridad.

Consejos para afrontar esta situación

  • Tienes derecho a estar triste. No te culpes, la tristeza es una emoción natural y sacarla al exterior forma parte de nuestra naturaleza y humanidad.
  • Mantén tu autoestima. Es importante que seas consciente que el autoestima refleja en gran parte lo que mostramos de nosotros a los demás. Acudir a una entrevista bajo de moral, mermará tus posibilidades. Es sencillo decirlo pero debes luchar por mantener tu autoestima a flote.
  • No sientas vergüenza. El desempleo forma parte de nuestra sociedad, no somos culpables, todos en algún momento de nuestra vida hemos pasado por momentos difíciles. Lo importante es lo que hacemos para resolverlos y de aquí deberás sacar tu propia riqueza personal.
  • Ocupa tu tiempo. En todos los ratos muertos que tengas, utilízalos para realizar actividades que te satisfagan. También es un buen momento para estudiar o ponerte al día.
  • Intenta mantener una rutina. No sucumbas a la flexibilidad de tus horarios, planifícate cómo hacías cuando trabajabas, levántate a la misma hora y sigue pautas de comidas y cenas. Puedes crearte un horario y organizar así tu día.
  • Toma el control de tu vida. Aunque la situación laboral depende también de factores externos, debes asumir tu responsabilidad. Asume el control y no pienses que tu suerte depende únicamente de los demás. Está en tú mano hacer todo lo posible por cambiar tu situación.
  • Dibuja una "Rueda de la Vida". La rueda de la vida es un gráfico donde se divide en partes distintas parcelas de nuestra vida, amor, familia, trabajo… Así podrás ver que aunque una parte falle se tienen otras razones a las que aferrarse y por las que luchar.
  • Mantén tu imagen. No dejes que tu aspecto físico decaiga, sigue acicalándote cada mañana y luciendo tu mejor sonrisa.
  • Rodéate de tus seres queridos. Las relaciones personales y el apoyo emocional de la familia y amigos cercanos son una gran ayuda psicológica. Mantener estas relaciones hará que te sientas valiosa, querida y útil.
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