- Para Padres
Para aquellas mamás que por un motivo u otro no pueden amamantar existe una alternativa que debes conocer.
Todos sabemos la importancia que tiene la alimentación de un niño en sus primeros años de vida, para ser específicos en sus primeros dos años de vida. En ellos se define, a través de la nutrición que el bebé tenga, la morbilidad y mortalidad, así como el riesgo a enfermedades crónicas y su desarrollo en general.
Por supuesto, también conocemos que la lactancia materna es tan importante y óptima que, según indica la Organización Mundial de la Salud (OMS), permitiría salvar la vida de unos 800 mil menores de 5 años, todos los años. La OMS y Unicef recomiendan el inicio inmediato de la lactancia materna en la primera hora de vida y mantener esta alimentación de forma exclusiva durante los primeros 6 meses de vida. A partir de este periodo se deben introducir alimentos complementarios seguros y nutricionalmente adecuados, continuando la lactancia materna hasta los 2 años.
“La importancia de que los bebés sean amamantados es debido a que la leche materna es un producto que la mamá crea específicamente para ese bebé, contiene nutrientes especiales y específicos que ese bebé requiere”, explica la nutricionista panameña Sara Saldarriaga.
Sin embargo, en algunos casos, la lactancia materna no es una opción viable para la mamá. Allí es donde entra en juego la leche de fórmula. Existen seis ingredientes principales en la fórmula: carbohidratos, grasas, proteínas, vitaminas, minerales y otras sustancias nutritivas. Además, algunas marcas en el mercado agregan a la fórmula dos tipos de ácidos grasos llamados ácido docosahexaenóico (DHA) y ácido araquidónico (ARA), ambos también encontrados en la leche materna y que son los encargados del desarrollo del cerebro y de la visión.
En el 2005 se realizaron estudios publicados en la Revista Estadounidense de Nutrición Clínica (American Journal of Clinical Nutrition), en la que se mostró que los bebés a término alimentados con fórmula que contenía DHA y ARA tuvieron una agudeza visual notablemente mayor que aquellos que no tomaron dichos suplementos.
“Las fórmulas son alternativas que tenemos por si se presenta algún caso específico de impedimento en la mamá. Las fórmulas han sido llevadas a la mayor similitud posible de la leche materna, están diseñadas también para lo que el bebé necesita en cada etapa”, explica la especialista. “La fórmula no es un producto contraindicado”, aclaró la nutricionista.