- Sexo y Pareja
Hoy tenemos la libertad de elegir y, con ello, la responsabilidad de cuidarnos aún más.
La realidad es que cada día, el sexo deja de ser una cosa exclusiva para casados o parejas estables para volverse una excelente opción para aquellas personas que no quieren comprometerse ni complicarse, mientras esperan el momento o persona indicada.
El que resulte ser una experiencia gratificante o una tragedia, depende mucho de la actitud y visión que tengas de la relación, y que sepan lo que están haciendo de manera consciente, que lo que quieren y sientan esté acorde con lo que hayan acordado.
¿Qué se tiene que tener presente en este tipo de relación?
1. Si no obtienes “lo tuyo”, entonces la cosa no está funcionando: este tipo de relación se basa en la premisa de que cada uno vela por su propia felicidad, placer y estabilidad emocional. Si tu chip es el de complacerle, hacerle feliz, velar por él, entonces estás haciendo las cosas mal; este tipo de relación es sobre ti y exclusivamente sobre ti.
2. Evita las culpas: si eres de las que vives llena de prejuicios, culpas y autocastigos sociales, este tipo de relaciones solo te va a traer más traumas que aprendizajes.
3. No ventiles tus relaciones sin compromiso: este tipo de relaciones son de las que no se profesan socialmente. No es tu novio, no es tu amigo, no es la persona que se va a parar a tu lado en ningún evento social ni en tu peores momentos. Por lo tanto, no vale la pena que le hagas fama social.
4. Elige bien: increíble, hasta para una persona poco trascendental hay que escoger bien. Evita la toxicidad, la mentira, los aprovechados, y la gente que no sabe guardarse las cosas. No te expongas a personas difíciles y sus situaciones pesadas, cuando esto se trata de pasarla bien.
5. Guarda el drama para tus seres queridos: así mismo es, para aquellos que se han ganado un lugar en tu corazón. Un compañero de cama sin compromisos, o como le quieras llamar es sexo y solamente eso, no es tu confidente ni tu terapeuta ni tu hombro para llorar.
6. Mantén el control de la protección: no te confíes ni esperes que sea él quien tenga el 100% la responsabilidad de los preservativos. Es tu responsabilidad y deber cuidar de tu cuerpo y salud, él no tiene por qué estar al cuidado y atención del tuyo. No olvides, han pactado no tener compromisos.
7. Fuera de la vista, fuera de la cabeza: en pocas palabras, tú no tienes nada que ver con su vida y él no tiene nada que ver con tu vida privada. Lo único que comparten es la cama y es lo único que te tiene que preocupar.
8. Tienes derecho de decir no a las cosas que no te parecen y te incomodan, al mismo tiempo de decir sí y proponer lo que quieras: este tipo de relación facilita el que uno se desinhiba y quiera experimentar cosas nuevas y atrevidas. Cuando no hay tantas emociones de por medio, uno le da más rienda suelta, piensa más en sí, se libera sin pensar en la opinión o sentir del otro. No olvides que la otra persona también se sentirá igual, el uso de los límites será más que necesario.
Este artículo fue escrito por la Sexóloga Maritere S. Lee para Revista Mujer y fue originalmente publicado el 15 de mayo de 2013
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